El miércoles a las 7 de la mañana quedamos enfrente de mi casa, “el gallego” y Vero nos venían a recoger a Cristo y a mi en el Focus que habíamos alquilado, Cristo y yo llevábamos un paquete de pan bimbo hecho bocatas, patatas fritas y lo más importante, una caja de 16 latas de las grandes de Foster’s. Primero nos dirigimos a Manchester, fuimos al hotel de la selección a recoger nuestras entradas, pero no vimos a nadie conocido (una pena), estuvimos viendo un biblioteca enorme que tienen, un poco los edificios, etc, porque Manchester no tiene nada especial. Cuando llegó la hora nos fuimos hacia el “Old Trafford” (como suena de bien, eh?) y compramos una botella de Whiskey, Coca cola y hielos, y buscamos vasos, pero no había, y en el Subway no nos quisieron dar 3 vasos (cabrones!!!) así que le compramos 3 vasos por 1 pound a uno de un puesto de perritos. Nos pusimos a gusto Cristo, Toño (otro alumno de la UEM de Erasmus en Londres que hizo el viaje con nosotros) y yo, porque hacía un frío inaguantable y entramos a ver el partido.
Fue increíble, el partido no fue bueno, pero no nos quedamos quietos ni un segundo, sin dejar de animar en ningún momento, y pasándonoslo que te cagas. Por cierto, ¿alguno que viese el partido oyó a alguien gritar… “Torres bazofiaaaaaaaaaaa”? era yo. Cuando acabó el partido nos fuimos a tomar unas cervecitas y a casa a dormir.
Al día siguiente desayunamos en el hostal y nos toco esperar a que trajesen otra caja de mantequilla, lo que nos hizo llegar 20 minutos tarde al coche, que estaba en zona azul y nos pusieron una multa de 60€, 30€ si lo pagamos en 14 días. Como siempre… la culpa es del Sevillano, que no se le olvide a nadie (que Toño y yo estuviésemos desayunando con el no quiere decir nada, jejeje). Arrancamos y pusimos rumbo a Liverpool, paramos en el mundo de Gulliver pero estaba cerrado. Se puso a nevar y cuando llegamos estaba todo nevado. Allí vimos muchas cosas, las 2 catedrales, Anglicana y Católica, el barrio chino, el museo de los Beetles por fuera (era muy caro y ninguno estaba muy interesado en el), un museo marítimo, y por la noche fuimos al famoso “The Cavern” el bar donde solían ir los Beetles, allí había un grupo imitándoles y tocaban muy bien, así que allí estuvimos toda la noche aunque a ninguno nos gustasen los Beetles.
El viernes dimos un pequeño paseo por Liverpool y salimos a ver el Castillo de Warwick (uno de los castillos más conocidos de Inglaterra), que era carillo, 15€ pero merecía la pena porque era muy chulo, y eso que tenía cosas cerradas por la nieve. Y después fuimos a Stratford-upon-Avon, que es el pueblo de Shakespeare, no pudimos entrar en su casa porque llegamos 15 minutos tarde, una pena, pero estuvo bien. Al terminar de verlo, congelados por el tiempo, nos fuimos a tomar un cafecito y otra vez al coche dirección Oxford.
Una vez en Oxford, dejamos las cosas en el hostal y nos fuimos a cenar a un Pub donde nos encontramos a una Gallega que nos trató muy bien, y la comida la mejor del viaje. Tras ello nos fuimos de marcha, pero no nos gustó mucho, porque casi todos los sitios eran de pagar, uno de ellos incluso no pudimos entrar porque no íbamos con chicas, cagaté!!! Y si las hubiésemos tenido, aún así tendríamos que haber pagado 9€ solo por entrar, sin copa ni nada. Así que en el único bar que nos gusto bebimos unas copas de J&B (que bien sabe el Whiskey de siempre…) y nos fuimos a dormir.
El Sábado nos dedicamos a ver Oxford (todos coincidimos en que el lugar más bonito de los que hemos visitado), las universidades, bibliotecas, iglesias, residencias, el jardín botánico, todo muy bonito, pero como estos no me dejaron desayunar porque tenían prisa por visitar cosas, y eran la 4 o así y no habíamos comido, me empezó a entrar la pájara, me puse blanco, no tenía fuerza en las piernas ni ganas de hablar, incluso me empecé a marear un poquillo, y por fin Vero me vio y convenció a todos de ir a comer antes de que me desplomase. Después nos fuimos hacia la universidad de Toño, dejamos allí el coche y cogimos el tren hacia Londres, que como costaba 8pounds (12€) no pagamos y fuimos acojonaos todo el viaje por si no pillaban. En Londres fuimos a buscar un sitio en el que cenar, el Gallego nos mareo de un lado a otro y finalmente nos metió en un restaurante del barrio chino, sin duda uno bueno, jejeje, en el que comimos mal poco y caro, 1 pinta 4 pounds (6€), con eso lo digo todo, pero yo en el fondo me lo pasé bien, porque nos despoyamos). Después tratamos de salir de marcha, pero Londres no es un buen sitio para ello, así que fuimos a andar un poco por Londres de noche, viendo el Big Ben, el London Eye, etc.
El Domingo en Londres vimos el “British Museum”(donde, palabras de Toño, que lo explican bien, tienen todo lo que le robaron a otros países); el “Madame Tussaud’s” (museo de cera enorme) que costó 25pounds (37€), está muy chulo, aunque yo ya no repetiría en muchos años; y la “Tate Gallery”, que tiene arte moderno, que en mi opinión es una autentica patraña, además de feo con ganas, pero tenía una cosa chula, unos tubos, desde los que te tirabas para bajar desde unas plantas a otras, pero cuando fuimos nosotros ya habían cerrado lo de los tubos, menuda mierda!!!
Para terminar nos pusimos en marcha hacia la casa de Toño otra vez, en la estación de tren fue impresionante, había partido en el campo del Arsenal y se oía muchísimo animando a la afición. Volvimos a colarnos sin ticket en el tren, pero esta vez nos lo pidieron al salir de la estación, y pasamos los 5 haciéndonos los locos, fue una evasión en toda regla. Tras eso cogimos de nuevo el coche y volvimos a Plymouth.
En definitiva, una pasada de viaje.
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